lunes, octubre 30, 2006

Arte en Cáceres, un paseo por la historia

Dos apuntes antes de nada, tengo problemas para cargar las fotos de los edificios (sólo pude cargar la imagen que aparece), en cuanto los solucione las pondré a vuestra disposición; el segundo problema es una de las páginas:
http://www.marevalo.net/caceres/hitos.html

Aparece la página como caducada, es posible que esté en renovación, pues faltaban edificios históricos que no aparecían comentados. En cuanto sepa más noticias os la comunicaré.

En esta entrada completaremos el repaso a la historia de Cáceres mediante la expresión del Arte en nuestra ciudad.

Cueva de Maltravieso

Se trata de una reproducción de la Cueva de Maltravieso, considerada la huella más relevante del arte paleolítico en Extremadura.Cuenta con una treintena de grupos de motivos que representan setenta manos humanas en negativo, rodeadas de pigmentos rojos.




EDIFICIOS RELIGIOSOS


Iglesia de Santa María, Concatedral de Cáceres

Tiene rango de concatedral al compartir sede episcopal con la ciudad de Coria. Es una iglesia gótica, de tres naves. Lampérez la considera del gótico decadente extremeño y Floriano como obra gótica armada con evidentes restos románicos de una fábrica anterior, llegando éste a afirmar que ya estaba en pie la iglesia en el siglo XIII. En el XIV, Marta Martínez de Orellana, que en la iglesia se entierra, dejó dineros para construir la cabecera poligonal. La capilla de San Miguel es del siglo XVI. La de los Blázquez o del Cristo de Santa María, del XV. El coro, del XVI. La torre la labraron en 1554, siendo dirigida por Pedro de Ibarra. En el interior del templo existen enterramientos de Hernán Pérez Golfín, Becerra, Ulloa, Carvajal, Durán, Espadero, Gómez Solís, Godoy, García de Mayoralgo -el de éste y su mujer, Marta Martínez de Orellana, son góticos y de alabastro-, del doctor Rivera -de 1538, del escultor Etor Hernández-. El púlpito de hierro forjado perteneció al convento de Jesús.
En 1547 se contrató con Guillén Ferrán y Roque Balduque, ambos de Sevilla, la realización del retablo mayor, plateresco, de vino de Flandes y cedro. La temática del retablo gira en torno a la vida de la Virgen María. Considerado una de las obras cumbres de la escultura renacentista en Extremadura, ambos tallistas invirtieron tres años y medio en su ejecución.
En su bonita sacristía de portada plateresca se encuentra el Museo Catedralicio, pequeño, recogido, pero exhibiendo piezas de indiscutible valor por su belleza y buena disposición.
Las nervaciones que dividen la plementería de este templo presenta en sus claves y entrecruzamientos todo un catálogo de escudos y símbolos heráldicos de los principales linajes cacereños: Orellana, Espadero, Becerra, Ovando, Golfín, Ulloa, Aldana, Figueroa, Carvajal y Mayoralgo, que se repiten en laudas y enterramientos.
Adjunto al templo se encuentra la escultura en bronce de San Pedro de Alcántara, obra del escultor extremeño Pérez Comendador, que inmortalizó en esta obra su propio autoretrato.
Pese a que en la imagen no se ve esta estatua tiene los dedos de los pies brillantes por el desgaste, debido a que existe una tradición que dice que si una chica toca los pies del santo se casará con el primer hombre al que toque con esa mano, pero es poco creíble, hace cuatro años se lo conté a una chica, hizo la prueba conmigo ... y desde entonces no la veo.
Esta escultura no le ha gustado nunca a ningún director de todas la películas que se han rodado en esa plaza, por eso tiene un cerco de restos de pegamento con el que adhieren el contrafuerte de pega con el que la tapan.


Iglesia de San Francisco Javier

Coronando la Plaza de San Jorge se alza esta iglesia barroca del siglo XVIII, junto al Noviciado de la Compañía de Jesús. La fachada, con arco de medio punto, está flanqueada por dos torres cuadradas de sillería y mampostería. Tiene una sola nave de planta de cruz latina.

En el siglo XIX sería cedida a los miembros de la Congregación de la Preciosa Sangre, merced a la generosidad del marqués de Ovando que les cedió su casa de los Solís.

Es de los pocos edificios que se han vuelto a encalar ya que ese era el estado original de toda la parte antigua de Cáceres. Todo el mundo viene y quiere ver piedra, pero en el fondo eso es un pastiche. Lo mismo le pasó a Ridley Scott cuando rodó en esta plaza unas escenas de 1492, el cura le dejó pintar la iglesia como quisiera siempre que luego le sufragara los gastos de ponerla arraglarla luego como a él -el cura- le apeteciese. Hace poco se la ha restaurado en parte.


Convento de San Pablo

Es un convento de clausura perteneciente a las monjas franciscanas. La iglesia es de estilo gótico levantada a finales del siglo XV, época en la que se produce la fundación del mismo. La fachada tiene una sencilla puerta gótica de arco apuntado y alfiz, rematada por una bella espadaña barroca del siglo XVIII, con dos campanas, adornos de volutas y medallón con inscripción, y coronada por una cruz de piedra. El interior es una pequeña iglesia de planta de cruz latina, con retablos churriguerescos, y cinco altares. La parte conventual se organiza en torno al sencillo claustro, de dos pisos, con arcos carpanales en el inferior y de medio punto rebajado en el superior, en cuyos muros hay restos de pinturas del siglo XVI.


Ermita de la paz

Pegada a la Torre de Bujaco, data del siglo XVI, aunque sufrió sucesivas reconstrucciones hasta el siglo XVIII (la última en 1756). Tiene un pórtico con tres arcos de medio punto, bóveda de ladrillo y reja con el águila bicéfala de los Autrias. Dentro de la ermita hay un retablo barroco.





Iglesia de San Mateo

Se edificó sobre el lugar antes ocupado por una mezquita. En el siglo XV Francisco de Ovando, el Rico, edificó su capilla, hoy sacristía. En el XVI se amplió y de ese tiempo son la portada plateresca, quizá de Guillén Ferrán, y la espadaña. La torre y la capilla de San Juan son del siglo XVIII. Tiene retablo mayor barroco, enterramientos de Diego Cáceres Ovando, si bien la escultura de alabastro es esfigie de Francisco de Ovando, el Rico, y de Juan de Ovando, el del primer Código de Indias. Fue tradicionalmente la parroquia de la nobleza cacereña.
Se levantó en el siglo XV sobre los restos de una mezquita árabe, y su construcción se prolongó hasta el siglo XVIII. Destaca la portada plateresca de la fachada principal. El interior, con una sola nave, tiene bóvedas de nervadura de granito. La capilla de los Sande, actual sacristía, es obra de Rodrigo Gil de Hontañón.
Iglesia de San Mateo. Erigida, probablemente, sobre una antigua mezquita almohade, la traza actual data de las reformas ejecutadas en el siglo XVI, excepto la torre, obra de finales del XVIII. Las constantes obras de restauración y consolidación del amplio catálogo monumental cacereño, impulsadas por su declaración como Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986, son buena prueba del empeño en devolverle su antiguo esplendor como el mejor legado para las generaciones futuras.


Iglesia de San Juan

Esta iglesia es de estilo gótico, se comenzó a construir en el siglo XIII con el ábside y continuaron con el resto de la iglesia hasta finalizarla en el siglo XVIII. Del exterior podemos destacar las dos portadas, a los lados de la nave, de arcos apuntados; el ábside, en el que podemos ver canecillos de tradición románica bajo la cornisa y dos escudos de esquina bajo yelmo. El interior es de una sola nave, cubierta por bóvedas de crucería con terceteles, de tres tramos, más ancha que la cabecera formada por un tramo corto, cuya bóveda es de traza más compleja y donde hay un hueco para reliquias con portada plateresca, muy decorada y labrada en la piedra, con querubines y busto de San Pablo. El ábside es de tres lados, todo cubierto con bóvedas ojivales de crucería, que arrancan de columnas cuya planta se deriva de la "de cruz" y cuyos capiteles están construidos por series de hojas y cabezas.


Convento de la Compañía de Jesús(o Palacio Luisa de Carvajal)

La portada de este convento barroco del siglo XVIII tiene un entablamiento sostenido por columnas de capiteles compuestos. En la parte superior hay un frontón quebrado, y debajo, un balcón. En el interior destaca el amplio claustro.
Este impresionante edificio adosado a la Iglesia de San Francisco Javier fue originalmente Noviciado de los Jesuitas por un breve periodo de tiempo, al coincidir su construcción a mediados del siglo XVIII con la expulsión de esta congregación religiosa. Posteriormente fue Real Colegio de Humanidades, instituto de enseñanzas medias, etc. Hasta su conversión en residencia femenina de estudiantes y en la actualidad sede del Centro de Estudios Extremeños y de Cooperación con Iberoamérica y Sala de Exposiciones. Su estructura barroca y la espacialidad solemne de sus accesos y estancias interiores nos hablan de la influencia que Manuel de Lara Churriguera debió ejercer en el diseño y trazado del edificio.


Iglesia de Santiago

Fue en origen un pequeño edificio conventual con un templo adosado construido probablemente bajo los auspicios de la Orden de Santiago junto a la calzada romana de la Vía Lata. Más tarde, mediado el siglo XVI, fue objeto de una amplia reforma impulsada por Francisco de Carvajal y Sande, en la que se le elevó la altura sin que se tenga muy claro si se modifico la planta. La obra fue principiada por el salmantino Rodrigo Gil de Hontañón que más tarde la abandonó por disgusto y reclamado para construir la universidad de Alcalá de Henares. Prosiguió el trabajo el trujillano Sancho de Cabrera terminándola hacia 1555.
Su monumental retablo fue encargado a Alonso de Berruguete, pero este falleció en 1561 siendo por lo tanto terminado por los artistas de su taller y trasladado a su destino definitivo en 1570.


En la página anterior, arriba, la iglesia de Santiago de los Caballeros, bella muestra de la arquitectura renacentista, con reminiscencias de la tradición gótica; abajo a la izquierda, la concha de la vieira, signo que distinguía a los peregrinos que iban a Santiago, por lo que se utilizó como ornamento en la iglesia dedicada a este santo; e imagen de un peregrino labrada sobre una de las portadas del templo, talla ingenua y primitiva que porta todos los símbolos propios de su condición. Este hermoso templo se levantaría por el patrocinio de don Francisco de Carvajal y Sande, quien contrató a Rodrigo Gil de Hontañón para iniciar las obras, y a Alonso de Berruguete para labrar el magnífico retablo que preside el presbiterio.
En otra época su plaza albergó la marcha de la zona, pero ahora está bastante tranquila.


El Santuario de la Virgen de la Montaña.

El actual edificio es el resultado de la unión de tres capillas.

Primera Capilla:
Entre los años 1621 al 1626, un eremita natural de Casas de Millán, llamado Francisco de Paniagua, comenzó a construir la primera capilla, en donde D. Sancho de Figueroa, Cura de Santa María y amigo de Paniagua, dijo la primera misa el día 25 de marzo de 1626, fiesta de Nuestra Señora de la Anunciación.
El primitivo lugar de culto esta localizado, en la actualidad, en el segundo tramo de la nave conocida popularmente por “La Gruta” o “La Cueva”, en el punto en el que está colocada la imagen pequeña de la Santísima Virgen. Ocupa una superficie en planta de 6’50 por 2’70 metros, con bóveda de medio cañón y una altura de 2’50 metros. Hoy en día se ha reconstruido en dos oquedades allí existentes, el lecho y la cocina del eremita.

Segunda Capilla:
En 1630, Francisco de Paniagua inicia la construcción de un camarín para la Sagrada Imagen, pero el aumento de la devoción hizo que el proyecto de camarín se convirtiera en una segunda capilla. Paniagua no puede ver terminada su obra, al sorprenderle la muerte en 1636. No obstante, encarga a su amigo D. Sancho de Figueroa y Ocano, según consta en su testamento, otorgado el día 24 de mayo de 1636, la conclusión de ella, lo que probablemente acaecería en el año 1661.
Para la construcción de esta capilla, se amplió en sentido longitudinal la primera capilla, con el fin de construir en la planta superior habitaciones para el ermitaño y hospedería. Esta segunda capilla, corresponde a un poco más del tramo que hoy ocupa el coro principal del Santuario.

Tercera Capilla:
Ante el auge que había tomado el culto a la Virgen de la Montaña, se agranda el Santuario en sentido de profundidad a la segunda capilla, aprovechando los muros de ésta y dándonos como resultado el estado actual del conjunto.
Las obras son encargadas al maestro Juan Sevillano que construye la nave central entre 1716 y 1721. El actual retablo Mayor, de estilo churrigueresco, se construye en 1724 y entre 1725 y 1727, se realiza el actual camarín.
La planta de cruz latina es el resultado de la construcción de la Capilla del Cristo de la Salud, al lado del Evangelio, en 1754, obra de Pedro Sánchez Lobato; y de la Capilla de Santa Ana, al lado de la Epístola en 1775, obra de Francisco Lobato.
Ambas capillas presentan retablos dorados donde se exponen al culto sus imágenes titulares. Como curiosidad cabe señalar que el artista Vicente Barbadillo hizo el retablo antes de que la imagen del Cristo de la Salud estuviera en Cáceres y la hornacina le quedó pequeña, aunque pudo ser reparada.
Consta, por tanto, el Santuario en su actual configuración de coro alto, nave central, camarín y las dos capillas dichas.
La nave central del Santuario actual es de estilo barroco y consta de una nave con dos tramos. La bóveda es muy plana, con aristas y resulta de la intersección de dos medias bóvedas de medio cañón. Es meritoria la cúpula gallonada sobre pechinas decoradas con frescos de los cuatro Evangelistas y motivos geométricos al gusto Luis XV.
Concluida la obra, el Santuario, entonces bajo la denominación de Ermita, fue bendecido el día 27 de noviembre de 1721.

MONUMENTO AL SAGRADO CORAZÓN DE JESUS

Auspiciado y sufragado por el Obispo Excmo. Sr. D. Pedro Segura Sáez, se erigió un monumento en homenaje al Sagrado Corazón de Jesús, para que toda la ciudad quedara bajo su protección.
El Nuncio de Su Santidad en España, Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Federico Tedeschini, bendijo el monumento el 14 de noviembre de 1926.
En 1930 es colocada una placa en el monumento que reza:
“Por iniciativa y costeado por el Excmo. Sr. D. Pedro Segura Sáez, Obispo de Coria, se erigió este monumento que bendijo e inauguró junto con el Dr. Segura, el Excmo. y Rvdmo. Sr. Federico Tedeschini, Nuncio de Su Santidad en España el 14 de noviembre de 1926”.



CASAS Y PALACIOS SOLARIEGOS


Palacio de los Golfines de Arriba

A mediados del siglo XV se escinde una rama de los Golfines y se instalan en la parte alta de la ciudad construyendo un verdadero alcázar fortificado, conociéndose el linaje y el palacio con el nombre de los Golfines de Arriba. Acomete la iniciativa el matrimonio formado por D. García Golfín e Isabel de la Cerda que durante la segunda mitad del siglo XV levantan el palacio, de forma cuadrangular con sendas torres en las esquinas, de las cuales todavía se conservan tres, aunque desmochadas. Desde comienzos del siglo XVI se hacen ampliaciones construyendo nuevas dependencias y sobre todo, en tiempos de otro García Golfín, nieto del primero, se promueve la construcción de una gran torre de Homenaje en el centro del palacio, contratada con el cantero Andrés Alonso en 1513, con la que, como ocurre en otros casos, sobre todo se pretende hacer manifestación simbólica de poder y de ostentación, tanto de dinero como de fama. En este caso contó con la oposición de algunos vecinos que denunciaron la obra alegando la prohibición de los Reyes Católicos de 1476, por lo que las obras se paralizan provisionalmente hasta 1516 que se resuelve a favor del promotor de la torre con la condición de no abrir huecos frente a la casa del demandante.
La parte baja de esta torre tiene una cámara bastante cerrada y en piso principal una capilla con bóveda de crucería sencilla donde destacan las armas de García Golfín y de su esposa Mencia de Ulloa. Desde ese nivel hasta la terraza la torre es enteramente hueca y sólo está ocupada por los distintos tramos de escalera que suben hasta la terraza. Su interior es un auténtico museo de bellas antigüedades y viejos recuerdos. En las caballerizas y patio posterior se ha instalado un elegante restaurante.


Palacio de los Golfines de Abajo

La casa principal de este linaje ocupa un lugar próximo a la iglesia de Santa María, y en ella se puede ver la fusión de los conceptos de palacio y al mismo tiempo de fortaleza, todavía más inclinado a su vertiente defensiva en el siglo XV, cuando tenía muros almenados y piezas de artillería. Durante el primer tercio del siglo XVI su titular entonces, Sancho de Paredes Golfín, que había sido Ayudante de Cámara de Isabel la Católica, acomete importantes reformas dentro de la estética renacentista de su tiempo, y aunque se mantuvieron las dos torres medievales que todavía pueden verse, la mas alejada de la esquina fue decorada con motivos heráldicos, medallones y cartelas alusivas al rango de sus moradores, rematándose toda la fachada con una crestería de grifos y guirnaldas de carácter humanístico y gusto plateresco.
Esta hermosa fachada está considerada como la más bella del conjunto de Cáceres. Su delicada crestería plateresca, que remata y decora su fachada y la torre de la izquierda, así como la esbeltez compositiva de esta casa-fortaleza forman un elegante conjunto. Fue residencia de los Reyes Católicos en las frecuentes ocasiones en que vinieron a Cáceres, por lo que se incluye su escudo real entre los que se labraron en su portada. En una elegante cartela recercada en la parte alta de la fachada dice: "Esta es la casa de los Golfines", y en el interior, en otra, se escribe: "Aquí esperarán los Golfines el día del Juicio".


Palacio del Comendador de Alcuescar(ahora Parador de Turismo)

En la calle Ancha puede verse otra gran torre todavía en su integridad. Se encuentra en el llamado Palacio del Comendador que fundó a mediados del siglo XIV Diego García de Ulloa que fue Comendador de Alcuéscar, de la Orden de Santiago, de donde recibe el nombre. Lo más antiguo precisamente es la torre que se alza en la esquina, en la que se ven los escudos heráldicos en los que se acumulan las armas de todos los antepasados hasta el momento, así como vanos y adornos góticos labrados con los rasgos propio del siglo XV, posiblemente incorporados por un nieto del fundador, el famoso en su tiempo Diego García de Ovando ¿el Rico?. La cornisa y balaustrada, incorporada en el siglo XVI, alteran definitivamente la imagen castrense y militar que pudiera tener la torre. En ese mismo tiempo se construye el patio porticado y mucho más tarde, a comienzos del siglo XVIII, se define la portada donde se abre la puerta principal, la cual se remata con el escudo de los Marqueses de Torreorgaz y las armas de sus titulares en esas fechas, don Diego Antonio de Aponte y Zúñiga y su esposa María de Ulloa. En este palacio está instalado ahora el Parador Nacional de Turismo de Cáceres.
Este palacio fue mandado construir a mediados del siglo XV por Diego García de Ulloa, Comendador de Alcuéscar de la Orden de Santiago. De esa época conserva la torre de aires castrenses, que cobija la profusión heráldica de la familia. El aspecto defensivo que aún conservan las antiguas casas-fuertes cacereñas data de la época de la Reconquista y dan fe de la preeminencia guerrera y política de sus primeros moradores. Durante varios años albergó este edificio la Delegación Provincial de Turismo y Cultura, situándose en sus caballerizas el restaurante El Comendador, de la Dirección General de Paradores.
Tanto la fachada principal, de factura neoclásica, como el patio porticado interior datan del siglo XVIII y son consecuencia de las reformas llevadas a cabo por los descendientes del Comendador, los marqueses de Torreorgaz, cuyo blasón se erige sobre el balcón. Desde 1989, tras una minuciosa restauración, este palacio se convirtió en Parador Nacional de Turismo, que por su elegante disposición y ambiente ha servido de alojamiento a los reyes de España y a otros ilustres visitantes.
En la actualidad es Parador de Turismo. Su construcción se inició en el siglo XIV, aunque sufrió varias reformas hasta el siglo XVIII. Tiene fachada neoclásica y torre de mampostería en la base y sillería granítica el resto, rematada por una balaustrada y varias gárgolas.


Palacio de Carvajal

Se trata de un edificio de los siglos XV y XVI que se adivina entre la iglesia de Santa María y la torre de Ovando, formando un armonioso conjunto. La fachada principal, de sillería granítica, tiene portada en arco de medio punto. Enmarcado en un alfiz está el escudo de Carvajal en relieve. Destaca el balcón en arco apuntado, en la esquina de las dos fachadas. La torre, frente al ábside deSanta María y del siglo XII, es redonda y está realizada en sillarejos. Hoy en día es la sede del Patronato de Turismo.
Se pueden visitar sus dependencias interiores, como el patio y el jardín, lo que trasladará al visitante a los momentos de mayor esplendor de la villa, de la mano de una de las familias más linajudas y prolíficas de Extremadura. Los Carvajales llegaron en el siglo XIII para establecerse primitivamente en Plasencia; distintas ramas se instalaron posteriormente en Trujillo y en Cáceres.
Su torre redonda es una de la más antiguas de entre las situadas intramuros. Pese a que se ha venido hablando de su origen árabe, ya hemos dicho en otras ocasiones que se trata de una torre enteramente cristiana, posiblemente datable en el siglo XIV, aunque lleva algunas ventanas de arco túmido, como en otras casa cacereñas, incluso de cronología más moderna. Desde luego es el primer elemento construido en este palacio ya que esta rama de los Carvajal utilizó una torre preexistente y añadió desde finales del siglo XV el palacio que ahora podemos ver. La parte inferior de esta torre cilíndrica fue readaptada todavía en fecha más tardía, a finales del siglo XVI, rehabilitándola como capilla y oratorio privado, incluyendo una bella decoración manierista al fresco con pasajes sobre la vida de la Virgen y de Jesús enmarcados por motivos arquitectónicos fingidos y blasones de los Carvajal dueños de la casa.



Palacio Episcopal

En un lateral de la Plaza de Santa María se encuentra este elegante palacio que mandó reedificar el obispo cauriense Pedro García de Galarza a finales del siglo XVI, y cuyo escudo se puede apreciar sobre la ventana central de la segunda planta. Destaca su elegante portada de arco de medio punto con doble almohadillado de sillería, flanqueada por dos medallones que representan a un indio y una india americanos. Este palacio consta de dos portadas más, la procedente del antiguo seminario de San Pedro, fundado en siglo XVII por el mismo obispo Galarza y que se trasladó hasta aquí tras su derribo; y de la calle del Arco de la Estrella. La situación de esta hermosa construcción, cuyas traseras daban al adarve y a la Puerta Nueva, fue motivo de los pleitos tenidos con el Marqués de la Quinta de la Enjarada por abrir y remodelar el Arco de la Estrella, para dar paso a sus carruajes.



Palacio de Mayoralgo

En la misma Plaza de Santa Maria se alza el solar de la familia Blázquez-Mayoralgo, representante de la más antigua nobleza cacereña, adquirido en 1999 por la Caja de Ahorros de Extremadura como sede de la institución financiera.
La fachada cuenta con elementos góticos y renacentistas. Destaca la portada con arco de medio punto, dovelas alargadas y dos ventanas geminadas. Tiene un patio mudéjar con arcos apuntados del siglo XIV.
A finales del 2001, y a consecuencias de las obras que se realizaban para la adecuación del palacio como sede de la Caja de Ahorros de Extremadura, se descubrieron en el subsuelo de su patio varios restos de la época romana entre los que se encontraban muros, una fuente y un busto de bronce recubierto con una capa de oro.


Palacio de Godoy

También llamada Casa de Roco. Este palacio renacentista, construido en 1548, cuenta con un espléndido ejemplo de balcón de esquina decorado con columnas y frontón sobre el que luce el ampuloso escudo de los Godoy-Aldana, obra de Pedro de Marquina. También destacan la portada de arco de medio punto con dovelas almohadilladas y los diversos escudos que aparecen en la portada.
Las hazañas en territorio inca de un descendiente de este solar, Francisco de Godoy, fueron inmortalizadas en la obra La Araucaria, escrita por el poeta Alonso de Ercilla. A él se atribuye el descubrimiento del tesoro de Pachacamac y a su oro gran parte de este monumental edificio.


Mansión de los Sande(o Casa del Águila)

Es una casa-fortaleza del siglo XV, de estilo gótico, que fue reformada en el siglo XVI. Lo más interesante de esta casa es la torre en ángulo, en la que está la portada principal, donde se destaca una zona con sillería, se abre la puerta en arco de medio punto con dovelas y sobre ésta el escudo de la familia Solís bajo yelmo caballeresco de frente con lambrequines, enmarcando el conjunto hay un alfiz gótico con una gárgola en su parte izquierda. En la parte alta podemos ver, flanqueado por dos ventanas en arco rebajado, un matacán semicircular con antepecho abierto por aspilleras en cruz y sujeto por tres mensulones. En el interior conserva un pequeño y bello patio renacentista, con dos de sus lados porticados, realizado a mediados del siglo XVI.



Palacio de las Veletas

Este edificio, sede del Museo Arqueológico Provincial, es obra del siglo XVIII. Destaca la graciosa balaustrada con columnas, pináculos y gárgolas de cerámica esmaltada en tonos verdes y azulados. Además del citado museo, la Casa de las Veletas exhibe en su planta superior un extenso y completo Museo Etnográfico con piezas originales de la vida popular y tradicional extremeña.
Además de albergar una importante colección de piezas históricas, cuenta con un aljibe árabe del siglo XII, único superviviente de la primitiva construcción sobre la que se alza esta casa, y uno de los de mayores proporciones que se conservan en el país. Cuenta con cinco naves excavadas en la roca y cubiertas por bóvedas de medio cañón sostenidas por arcos de herradura. Este aljibe ha sido tradicionalmente utilizado por los vecinos de la villa para proveerse de agua y todavía recoge el agua de lluvia.
El patio interior es renacentista y tiene arcos de medio punto sobre columnas toscanas. Unos jardines comunican la Casa de las Veletas con la instalaciones anejas de la Casa de los Caballos, en la que se exhiben al aire libre distintas piezas prehistóricas, como el berraco, y de otras épocas. La mayoría de las piezas exhibidas en las vitrinas y salas del museo proceden de las excavaciones realizadas por Adolf Schulten en el yacimiento romano de Cáceres el Viejo, cerca de la ciudad. Este museo es el más visitado de todos los que integran la Red de Museos de Extremadura. Más de cien mil personas pasan anualmente por sus salas para disfrutar de cerca de los tesoros que custodia, y conocer, así, un poco más y mejor nuestra historia antigua.
La verdad es que solo he entrado una vez, pero me fijé en que había muchos pardillos que se habían dedicado a lanzar monedas al agua, hay gente para todo. La imagen que me viene a la memoria cuando pienso en el aljibe es la princesa Grace de Mónaco en una foto de periódico visitándolo, por supuesto salía muy guapa.



Palacio de los Cáceres-Ovando(y torre de las Cigüeñas)

El palacio fue construido por iniciativa del Capitán Diego de Cáceres Ovando, paladín de los Reyes Católicos, quienes distinguieron su fidelidad al concederle autorización para construir su casa en lugar y con los materiales procedentes del viejo alcázar de Cáceres, que había sido derribado por los partidarios del Infante don Alfonso cuando se enfrentaba a su hermano el monarca Enrique IV. En la Real Cédula que dirigen los Reyes Católicos al Concejo de Cáceres en 1476 prohibiendo la construcción de fortificaciones privadas en la ciudad y ordenando el derribo de las existentes hasta el momento, hacen una significativa excepción al autorizar a este noble cacereño, don Diego de Cáceres, a construir su casa como quisiera.
El edificio se compone de cuatro crujías en torno a un patio claustrado, levantándose en la esquina frente a la iglesia de San Mateo la singular torre cuya autorización personal de los monarcas ya hemos comentado. Coincide con esa datación una inscripción que se refiere al año 1480, colocada sobre la puerta de entrada al primer piso de la torre; desde ese punto al acceso a la parte superior se efectúa a través de varios tramos de escalera adosados a los muros.
Aunque la portada ha sido profundamente restaurada no hace muchos años, con un acusado gusto historicista, el edificio conserva su primitivo carácter, mostrando el tipo de palacio urbano fortificado tan característico de la ciudad de Cáceres, en el que se combina su imagen sobria, fuerte y contundente, en su versión ejemplificante en este caso concreto, y al mismo tiempo la elegancia formal que aportan algunos de sus detalles constructivos, como las ventanas geminadas de arcos túmidos, encerradas en alfiz, los escudos familiares, en este caso de los Ovando-Mogollón, incluso el atractivo almenaje volado sobre canecillos coronando su estilizada torre.
A la derecha, la Torre de las Cigüeñas, en el Palacio de Cáceres-Ovando, contigua a la iglesia de San Mateo. Esta mansión que perteneció al capitán Diego de Ovando, conserva su esbelta torre almenada, la única superviviente de la orden dictada por la reina Isabel la Católica que obligó a desmochar las torres barbacanas de los linajes afines a la candidatura de Juana la Beltraneja, para evitar nuevas pendencias. Ovando, en pago a su fidelidad, la mantuvo enhiesta. Abajo, elegante ventana con mainel de mármol; la entrada a la casa convertida en sede del Gobierno Militar; y vista general de esta histórica mansión que forma junto a la Iglesia de San Mateo un atractivo conjunto.
Casa de las Cigüeñas e iglesia de San Mateo en la plaza del mismo nombre. Este palacio perteneciente a Diego de Cáceres Ovando fue el único que conservó su esbelta torre almenada, tras las Reales Ordenanzas dictadas por la Reina Isabel la Católica, por las que se obligó a desmochar las torres defensivas de los linajes que le fueron desleales.
Construida en el siglo XV, en la fachada destacan la puerta en arco de medio punto y dovelas alargadas, una ventana en arco conopial y dos escudos de armas, todo ello enmarcado por un alfiz con dos ventanas geminadas.


Casa de los Pizarro-Espadero o Casa del Mono

La Casa de los Pizarro-Espadero, llamada Casa del Mono. En la popular Cuesta de la Aldana se encuentra esta casa, actual sede de la Biblioteca Zamora Vicente, que toma el nombre del singular simio encadenado que remata el pasamanos de su escalinata y da acceso al recoleto patio que ilumina su interior. Cuenta la leyenda que este mono fue la causa de un sigular rapto; al parecer, habitaban esta casa un anciano comerciante y su joven esposa al a que regaló tan exótico animal para su entretenimiento. El monito juguetón, sin embargo, se sintió desplazado al nacer el primer descendiente del matrimonio, fruto de las relaciones entre la dama y un criado, al que raptó por celos. Además, según la misma copla popular, las tres gárgolas que se encuentran bajo el alero de la fachada principal representarían a los protagonistas de la fábula: la mujer doliente que grita su pena, el barbudo y anciano marido y el joven criado. El elegante escudo nobiliario labrado sobre la portada y flanqueado por leones rampantes aúna los apellidos Cáceres, de los Nidos, Andrade y Pizarros.
Recuerdo la historia que tiene la casa: Un noble que hizo las américas volvió con un simio a Cáceres al cual dejó con su esposa encerrado en esta casa y volvió a marchar al nuevo mundo. Nadie entraba en la casa, y pasado un tiempo aquelló empezó a oler bastante mal, literalmente hablando. Al forzar la puerta se decubrió que el mono, en un ataqué de rabia, había matado a todos los habitantes y tras ello había muerto; de ahí le viene el nombre. Ahora alberga un museo que no debe ser demasiado interesante.



Casa de los Pereros

La Casa de los Pereros, de simétrica y rotunda fachada y hermoso patio, obra de Pedro de Marquina, prestigioso cantero del siglo XVI. Esta casa, solar de la poderosa familia Perero o Pereiro, relacionada con la Orden Militar de San Julián de Pereyro que se transformó en la más conocida Orden de Alcántara, desapareció de la nómina de nobles locales. Tras sucesivas enajenaciones y abandonos pasó a manos de la Diputación Provincial que la convirtió en un horfanato para niñas y, ya en 1988, en Colegio Mayor Universitario Francisco de Sande.
En una de sus fachadas destaca la portada de arco de medio puto con dovelas alargadas y ventanas con molduras góticas. El patio renacentista, de 1561, es obra de Pedro de Marquina y está porticado en sus cuatro lados y en ambas plantas. La fachada principal pertenece a la segunda mitad del siglo XVI.



Casa del Sol (o de los Solís)

Esta casa-fortaleza de estilo gótico fue construida en el siglo XV y reformada en el XVI. Tiene una torre en ángulo en la que se encuentra la fachada principal. En el interior hay un pequeño patio renacentista del siglo XVI, con dos de sus lados porticados. Se denomina Casa del Sol por el inspirado astro que forma el escudo familiar que luce su fachada.
Aunque esta casa carece de torre sí es oportuno incluirla en este grupo de casas fortificadas, más por la intención "aguerrida" de sus propietarios a mediados del siglo XVI que por su dotación castrense efectiva, ya que lo único reseñable en este sentido es el matacán redondo que se adelanta en lo alto, lo cual no sería ninguna novedad si no fuera porque se termina a mediados del siglo XVI, cuando tal pieza no era necesaria para nada y menos si con él se pretende hacer frente al monumental dispositivo que se halla enfrente, en la torre de los Sande. Están documentadas las reformas de esta fachada de la casa del Sol o de los Solís, en 1549, fecha en la que es contratada por Francisco de Solís con el cantero Pedro Gómez. Por las mismas fechas este maestro realizará en el interior de la casa un pequeño pero delicado patio con dos lados porticados, en los que se dispusieron columnas, capiteles y arcos de gran elegancia, definitivamente adscritos al gusto renacentista del momento y lejos de la retórica medieval que, por razones de prestigio y rememoración de pasado, impera en la fachada.
El marqués de Ovando, poseedor de este palacio, lo cedería a la Congregación de la Preciosa Sangre en su testamento, hecho en Roma, a mediados del siglo XIX.



Casa Mudejar

También los mudéjares dejaron muestras de su paso por nuestra ciudad, como prueba de ello podemos ver este casa de estilo mudéjar del siglo XIV. Su fachada consta de dos partes: la inferior es de mampostería y la superior es de ladrillo rojo, donde destaca la ventana gemela de arcos de herradura apuntada, enmarcados por arrabá, con parteluz de granito cuyo capitel tiene forma de pirámide invertida y truncada. Esta parte de la fachada está muy decorada con formas geométricas realizadas por la disposic ión de los ladrillos, así vemos adornos en zig-zag y pequeñas ventanas, que van desde la gemela hasta el final de la casa. La originalidad de su construcción fue determinante para que fuese declarada Monumento Histórico-Artístico en 1931.



Casa de Carvajal y Ulloa(o Casa de Lorenzo de Ulloa)

En un recoleto rincón de la Plaza de San Mateo se alza esta casa de fachada gótica de buena cantería con portada dovelada y ventana festoneada, todo ello enmarcado por un alfiz que cobija la triada de escudos, dos de los Ulloa y el otro de los Carvajal.
En la fachada, obra de mediados del siglo XV, se aprecian los elementos característicos de las casas nobles cacereñas de la época. Tiene portada en arco de medio punto con dovelas alargadas, ventana con dos columnas y un alfiz que enmarca la ventana y los escudos heráldicos familiares.


Palacio Toledo-Moctezuma

Es renancentista del siglo XVI, realizado sobre una construcción anterior. La fachada está dividida en dos cuerpos por una cornisa, la inferior, del siglo XV, es de manpostería y sillería, destacando una portada adintelada, sobre la que hay un escudo. A ambos lados del balcón central hay una hilera de canecillos redondeados, excepto dos que son cabezas de águila. La parte superior, de ladrillo, tiene una galería de ventanas en arco escarzano que recorre todo el edificio. Destaca su singular torre cuadrada y terminada en cúpula rematada por otra más pequeña, en su interior, hay que resaltar el patio de estilo herreriano y los frescos de temática romana y azteca. Su nombre se debe al matrimonio formado por Juan Cano de Saavedra e Isabel de Moctezuma, hija del rey Moctezuma II, un nieto suyo Juan Toledo Moctezuma se casó con Mariana de Carvajal y Toledo, y ordenaron reedificar este palacio en el siglo XVI. Actualmente es la sede del Archivo Histórico Provincial de Cáceres.


Diputación Provincial

Es un edificio de estilo renancentista, construido en el siglo XVI. Está asentado sobre el lugar que ocuparon el Palacio de Hernán Pérez de Ulloa y el Convento de Santa María de Jesús, fundado en el siglo XV por las monjas jerónimas. Su fachada procede del Colegio de San Pedro, Seminario del Obispo Galarza. La portada es adintelada, de frontón triangular, coronando las columnas laterales adosadas con escudos de Galarza. En el frontón hay una imagen de la Virgen irradiante, en el interior de un óvalo. En la esquina de la derecha hay otro escudo de Galarza. Actualmente es la sede de la Diputación Provincial.


Palacio de la Isla

Se encuentra en la plaza de la Concepción esta joya del Renacimiento Cacereño. Se erigio en el siglo XVI promovido por una rama de la familia Blázquez-Mogollón recién llegados a Cáceres y no reconocida como tal por la familia ya asentada aquí desde la Reconquista, que explica el carácter crítico de las inscripciones que se pueden leer tanto en la fachada, "MODERATA DVRANT NOBILITAT ANIMVS NON ACTA PARENTVM", como en un escudo esgrafiado en el patio "VANITAS VANITATVM ET OMNIA VANITAS". Pese a su fecha de construcción destacan en este palacio un importante número de elementos medievales como las ventanas que se abren en la fachada con molduras góticas o el patio, de aspecto pesado y algo tosco en columnas y arcos en sus tres pisos, que contrastan con elementos avanzados para su tiempo como la portada de estilo manierista, a base de voluminosos y rústicos sillares almohadillados. El nombre del palacio se debe a que sus propietarios en el siglo XVIII ostentaron el título de marqueses de la Isla.


RECINTO AMURALLADO.


Se considera tradicionalmente que el trazado de la muralla de Cáceres es romano, así su forma aproximadamente rectangular, salvo en los lugares en los que la topografía lo impide, y la existencia de las puertas hacia el centro de cada uno de sus cuatro flancos, aunque éstas han sufrido importantes reformas en etapas posteriores, algunas incluso han desaparecido, conservándose todavía algo de su carácter romano en la puerta del Cristo, al igual que ocurría en la de Coria, según sabemos por descripciones de 1879, justo cuando fue derribada.
En todo caso la muralla romana, construida según parece de forma precipitada entre los últimos años del siglo III y comienzos del IV, debió ser posteriormente abandonada y, desde luego, muy alterada con motivo de la gran reconstrucción que realizan en la Edad Media los musulmanes. El cronista árabe Al-Umari dice de este emplazamiento que es una ciudad "bien defendida y como colgada de las nubes". Al-Idrisi a mediados del siglo XII insiste en su condición como fortaleza y señala al mismo tiempo que "...allí es donde se reúnen para asolar el país de los cristianos".
Pero la mayor parte de la muralla que ha llegado hasta nosotros es de época almohade, construida en el último cuarto del siglo XII sobre los restos de la antigua de época romana, cuando los monarcas cristianos intensifican su ofensiva sobre el borde meridional del río Tajo. La obra está ejecutada con encofrados de madera mediante cajas superpuestas, utilizando tapial de una textura y color muy característicos dada la constitución de la tierra arcillosa y la calidad de la cal de Cáceres, que junto con ripio y mampostería menuda intervienen en la mezcla de este peculiar hormigón. Las cortinas se refuerzan con torres adosadas o albarranas, todas de forma prismática según obliga el sistema constructivo de encofrados que dificultaba la creación de superficies curvas. La mayoría son de sección cuadrangular, como la torre del Horno, o la vecina torre de la Yerba, que se ven en la plaza Mayor flanqueando el llamado Foro de los Balbos situado junto al ayuntamiento. También se conservan dos octogonales, la torre Desmochada, en el lado suroriental, así llamada porque le falta su parte superior, y la llamada torre Redonda que se alza en el ángulo suroccidental, ésta última muy bien conservada, con la cámara superior todavía visitable, como la terraza almenada que se dispone en lo alto. También las de sección cuadrada tenían la parte inferior maciza, hasta la altura de los adarves, pero luego se culminaban con una planta, generalmente muy sencilla, con una sola nave cubierta con bóveda de cañón de ladrillo donde se abría un hueco que posibilitaba el acceso a la terraza con el uso de una escalera manual.
Durante la Edad Media se operaron algunas reformas en la muralla. Muy significativa es la que se acomete en la llamada torre de Bujaco, nombre que en realidad es una implantación romántica reciente, puesto que, como ha estudiado la profesora Lozano Bartolozzi, esta torre se la ha conocido desde la Edad Media con los nombres de torre Nueva y torre del Reloj, pero nunca con el que se usa en la actualidad. El aspecto actual de la torre viene determinado por las reformas de época cristiana acometidas durante los siglos XIV ó XV, fechas en la que se aprovecha el núcleo de la primitiva torre albarrana almohade y se forra con mampostería, reforzándose con saeteras y rematándose con matacanes y almenas de clara tipología occidental cristiana. El balcón que da frente a la plaza es un añadido renacentista, de mediados del siglo XVI, mientras que la rehabilitación acometida recientemente en la en la cámara de la parte superior es una intervención historicista que recrea tipos islámicos no existentes con anterioridad en la torre, ni en Cáceres, y por lo tanto caprichosos.
A finales del siglo XV se construye al lado la torre de los Púlpitos, junto a la entonces llamada puerta Nueva. Esta torre muestra la tipología empleada en el tiempo de los Reyes Católicos, cuando fue construida, con sus dos características garitas o escaraguaitas redondas en las esquinas, sobre ménsulas escalonadas y con troneras cruciformes en los flancos.
Las puertas también han sufrido algunas transformaciones, la de Coria al norte y la de Mérida en el sur, fueron derribadas en los siglos pasados, la de Coria en 1879 y la de Mérida a mediados del siglo XVIII.
La puerta del Cristo, así llamada por la imagen que se venera en la hornacina que está encima, es la única que conserva, algunos elementos del sistema constructivo romano, visibles en la parte inferior y en el arco, aunque lo que está encima y a los lados ha sufrido grandes modificaciones. La que sale a la plaza Mayor, construida en el siglo XV con el nombre de la puerta Nueva, reforzada entonces con la torre de los Púlpitos, como hemos dicho, va perdiendo paulatinamente su función y en el siglo XVIII tiene que reformarse para facilitar la circulación, transformándose en lo que ahora es el Arco de la Estrella tras la obras acometidas en 1726 según proyecto redactado por el famoso arquitecto barroco Manuel de Lara Churriguera.
En definitiva, la muralla se comporta, según los tiempos, como un elemento que procura la seguridad a los que están en el interior, o como un recinto que puede llegar a limitar su propio desarrollo, pudiendo considerarse que en este momento se ha llegado a una fase de equilibrio en la que lo correcto es procurar su mantenimiento como testimonio de la dinámica operada a lo largo de los siglos en el casco historico.



Torre del Bujaco

En la primera línea del alcazar, en la parte occidental de la Plaza Mayor se encuentra la llamada Torre de Bujaco, nombre que en realidad es una implantación romántica reciente, puesto que, como ha estudiado la profesora Lozano Bartolozzi, esta torre se la ha conocido desde la Edad Media con los nombres de Torre Nueva y Torre del Reloj, pero nunca con el que se usa en la actualidad.
Esta torre fue construida aprovechando una fortificación romana en la época almohade. Su historia está ligada a la de la ciudad cacereña. Cuenta la leyenda que el caudillo almohade Abu Yacub Yusub, de quien deriva el nombre de Bujaco, asedió en esta torre a los últimos residentes de los Fratres de Cáceres que defendía el baluarte allá por el año 1173, en el que murieron degollados a manos del musulmán. Los Fratres, mitad monjes, mitad soldados, fueron el germen de la Orden de Santiago, fundada posteriormente.
El aspecto actual de la torre viene determinado por las reformas de época cristiana acometidas durante los siglos XIV ó XV, fechas en la que se aprovecha el núcleo de la primitiva torre albarrana almohade y se forra con mampostería, reforzándose con saeteras y rematándose con matacanes y almenas de clara tipología occidental cristiana. El balcón que da frente a la plaza es un añadido renacentista, de mediados del siglo XVI, mientras que la rehabilitación acometida recientemente en la en la cámara de la parte superior es una intervención historicista que recrea tipos islámicos no existentes con anterioridad en la torre, ni en Cáceres, y por lo tanto caprichosos.
Hasta mediados de siglo tenía en la cima un arco con una estatua de la diosa Ceres, debido al peso se decidió eliminarlos, la estatua se trasladó primero al foro de los balbos, pero alli fue sustituida luego por una réplica. La Ermita de la Paz es obra del 1756.



Arco de la Estrella

No fue esta una de las puerta originales de la muralla cacerense sino que tiempo despues de su reconquista la ciudad se extendió a extramuros por la zona cercana a la muralla, especialmente por la parte occidental, creándose, en lo que hoy es la plaza mayor, un núcleo mercantil. Ello obligó a la apertura de una nueva puerta, que comunicaba directamente el interior del recinto con aquel centro de actividad económica. Para defender la Nueva Puerta se construyó una nueva torre, con sillares de granito y matacanes semicilíndricos y aspillerados en sus esquinazos, origen del nombre con que hoy se conoce el reducto, Torre de los Púlpitos.
Con el tiempo, la puerta nueva se hizo vieja y, por consiguiente, impracticable para los coches del siglo XVIII. Resultaba estrecha. A instancias y bajo los auspicios de don Bernardino de Carvajal Moctezuma y Vivero se derribó la Puerta Nueva, se construyó otra en 1726 con arco en esviaje según proyecto redactado por el famoso arquitecto barroco Manuel de Lara Churriguera y pagada por el Conde de la Quinta de la Enjarada, que se colocó bajo la advocación de Nuestra Señora de la Estrella.



Torre de la Hierba

La Torre de la Hierba fue construida por los árabes en la última fortificación que hicieron de la ciudad, en el siglo XII. Forma parte de la muralla, a la que está unida por un muro que permitía el acceso a la misma. Entre ésta y la del Horno se construyeron el siglo XIV las Casas Consistoriales y en ellas se celebraban las reuniones del Cabildo.



Torre del Horno

Esta torre es de las más visibles de la ciudad, flanqueando, junto con la Torre de la Hierba "El Foro de los Balbos" donde había una puerta romana. Fue construida por los árabes en la última fortificación que hicieron de la ciudad, en el siglo XII, formando parte de la muralla, a la que está unida por un muro que permitía el acceso a las mismas. Esta torre tomó su nombre del horno principal de la ciudad de Cáceres, que estaba adosado al lienzo de cortina en la rinconada de la torre.



Arco del Cristo

Llamado también Puerta del Río por la proximidad a la Rivera del Marco, está situado en el centro del flanco oriental de la muralla. Es la única puerta romana que aún se conserva, fue construida en el siglo I con grandes sillares dispuestos a soga y tizón y bóveda de cañón entre los dos grandes arcos de entrada y salida, cuyo vano es de amplia luz y profundo intradós. En su fachada interior destaca en una hornacina, un cuadro con la imagen de un Cristo, colocado a principios del siglo XIX. Se conserva también restos de uno de los torreones que la flanqueaban, la llamada Torre del Río.




PÁGINAS CONSULTADAS EN ESTE BLOQUE:

http://www.caceresjoven.com/paginas/turismo/virgen/virgen5.asp

Esta páginaa es la que utilicé para conseguir información sobre el Santuario de Virgen de la Montaña, porque en las demás páginas que consulté no ofrecían la información que requisaba, por lo que opté por buscar por otra parte este Santuario.

http://www.extremaduradirecto.com/index.asp

Poca documentación y pocos monumentos, además se centra sobretodo en la toda la región y no la focaliza en Cáceres.

http://www.publispain.com/viajes/caceres/monumentos.htm

Pocos monumentos se tratan. Aunque ofrece la posibilidad de mirar más bloques que no sean el arte.

http://www.marevalo.net/caceres/hitos.html

Muy buena esta página, trata muchos de los monumentos del casco antiguo de la ciudad de Cáceres y además en su página inicial ofrece un mapa del mismo. Muy completa e interesante.

Esta página también ofrece un listado de edificios religiosos y laicos, en muchos de ellos ofrecen enlaces para saber más información, en otros sin embargo no. Tienen multitud de fotos, y tratan a fondo los diferentes apartados de cada monumento. En definitiva, es una página fantástica.


http://www.ayto-caceres.es/ciudad/historia/

Esta página es la que utilicé para el apartado de historia, ofrece enlaces con los distintos edificios históricos, la información no es gran cosa más bien escasa y no trata las distintas partes de los edificios. Esta página la utilicé para algunos de los monumentos.

jueves, octubre 26, 2006

Web interesante.

Hola estimados amigos, querría informaros de una página en la que encontraréis material educativo, pertenece a la web de una cadena de documentales, Discovery Channel. Estos documentales os ofrecen distintas alternativas a la hora de impartir docencia en las aulas. Si podéis ver esta serie de documentales para niños.

La página ofrece material educativo para niños, padres y maestros; con lo que la información que ofrecen tiene mayor utilidad, ya que no sólo se reduce al aula. La página web es:
http://www.discoveryenlaescuela.com/espana/home.shtml

El enlace os llevará directamente a la web del programa, allí podréis elegir el tipo de material que necesitáis. Un sólo pero, la web está en construcción, por lo que no han subido todos los recursos que van a ofrecer, con un poco de paciencia en poco tendremos más recursos didácticos a nuestro alcance gracias a la colaboración de esta cadena de documentales.

Espero que os sea útil esta información. Un saludos a todos.

lunes, octubre 23, 2006

Historia de Cáceres




Bloque 1º: Historia de Cáceres.

La página de la que me he inspirado para crear esta entrada es la página del Excelentísimo Ayundamiento de Cáceres:
http://www.ayto-caceres.es/ciudad/historia/index.asp



Los primeros restos de asentamientos humanos en Cáceres se encuentran en la Cueva del Maltravieso que contiene valiosaspinturas rupestres, fundamentalmente dibujos de manos en negativo, puntas de flechas y algunos animales. Esta cueva, del Paleolítico Superior, tiene unos 25.000 años de antigüedad. Actualmente la cueva se encuentra cerrada al público, pero se puede visitar una magnífica reproducción, el Centro de Interpretación, justo al lado de la Cueva.


Los orígenes de Cáceres como núcleo urbano se remontan al año 25 a.C. con la fundación de la colonia romana Norbensis Caesarina, por Lucio Cornelio Balbo. De esta época se conserva una puerta en el flanco oriental de la muralla denominada Arco del Cristo o Puerta del Río
, por la proximidad a la Rivera del Marco.

Tras la caída del imperio viene una época de oscuridad de la que apenas se conserva información. A partir del siglo XII se suceden las luchas entre árabes y cristianos. En 1169, Cáceres es reconquistada por Fernando II. En 1170 se fundan los Fratres de Cáceres, orden de caballeros que tienen la misión de defender la fortaleza. En 1173 el caudillo almoárabe Abú Ya'qub arrebató la ciudad a los cristianos, reconstruyendo las murallas, que conservan sus basamentos romanos. De esta época se conservan algunas torres albarranas, entre las que podemos destacar: la de Bujaco,
la torre de la Yerba y la del Horno.

La incorporación definitiva de la ciudad al reino de León se produce el día 23 de abril de 1229 (
Día de San Jorge), con el rey Alfonso IX, por este hecho San Jorge es el Patrón de Cáceres.A partir de esta fecha se empezarán a construir numerosos palacios y casas solariegas girando en torno a dos núcleos: la Plaza de Santa María y la Plaza de San Mateo, que alcanzarán su mayor esplendor durante los siglos XV y XVI, sobretodo con los Reyes Católicos.

En la Plaza de Santa María podemos destacar: la Iglesia-Concatedral de Santa María
, que da nombre a la plaza. Le fue otorgada la categoría de concatedral en 1957; en su interior encontramos un magnífico retablo realizado en madera de cedro, obra de Guillén Ferrant y Roque Balduque, cuya principal característica es que conserva el color natural de la madera. Al pie de la torre se encuentra la imagen de San Pedro de Alcántara, de 1954, realizada en bronce por el escultor extremeño Pérez Comendador. El Palacio de Carvajal, que fue erigido entre los siglos XV y XVI, actualmente alberga el Patronato de Turismo y Artesanía de Cáceres. El Palacio Episcopal, su parte más antigua data del siglo XIII y la más moderna del siglo XVII, junto a su parte trasera podemos observar el Palacio de Toledo-Moctezuma, de estilo renacentista. Su nombre se debe al matrimonio formado por Juan Cano de Saavedra e Isabel de Moctezuma, hija del rey Moctezuma II, un nieto suyo Juan Toledo Moctezuma se casó con Mariana de Carvajal y Toledo, y ordenaron reedificar este palacio en el siglo XVI. Actualmente es la sede del Archivo Histórico Provincial de Cáceres. Volviendo a la Plaza de Santa María nos encontramos con el Palacio de Mayoralgo, este apellido deriva de la palabra “mayorazgo”, ya que esta familia fundó el primer mayorazgo de Cáceres. En 1364, Diego García era conocido como “Diego el del Mayoralgo”, así una derivación fonética del nombre de la institución, pasó a convertirse en el apellido de la familia. En la portada de este palacio hay que destacar una inscripción en latín, con dos salmos de la Biblia: “Sé Tú, Señor, para nosotros, torre de fortaleza; y se renovará, como la del águila, nuestra juventud”, que hace referencia al escudo de la familia (águila y torre).Continuando en la Plaza de Santa María, también hay que destacar la Casa de Hernando de Ovando, el Palacio de la Diputación Provincial y el Palacio de los Golfines de Abajo, uno de los edificios más emblemático de la Ciudad Monumental. Presenta elementos típicos de la casa-fortaleza gótica y decoración plateresca del XVII en su crestería. De la rama de los Golfines destacaremos a Alonso Golfín y García Golfín. Alonso Golfín fue señor de la Casa de Abajo y tuvo hospedados en su casa a los Reyes Católicos cuando vinieron a Cáceres en 1477 y 1479 y ellos mismos le concedieron la facultad para fundar el primer mayorazgo de esta familia y fue nombrado Camarero del infante D. Fernando y Continuo de Juana la Loca.

Entre la Plaza de Santa María y la de San Mateo, está la Plaza de San Jorge, dedicada al patrón de la ciudad, en la que se levantó en el siglo XVIII la Iglesia de San Francisco Javier
y el Convento de la Compañía de Jesús, ambos de estilo barroco, su construcción fue ordenada por los Jesuitas, éstos vinieron a Cáceres con motivo de la donación que hizo D. Francisco de Vargas Figueroa y Aponte, que profesó en la Compañía de Jesús, cediendo sus bienes a la comunidad, para que construyesen la Iglesia y el Convento. La obra finalizó en 1755, los jesuitas fueron expulsados de España en 1767, por lo que solamente ocuparon este convento durante 12 años.

En la parte alta de la ciudad, encontramos el segundo centro neurálgico: la Plaza de San Mateo, que recibe el nombre de la Iglesia de San Mateo
, edificada sobre restos de la antigua mezquita árabe. Justo al lado, en la Plazuela de San Pablo encontramos el Convento de San Pablo, de estilo gótico, y el Palacio de las Cigüeñas que fue ordenado edificar en 1476 por D. Diego de Cáceres-Ovando, es el único al que se permitió conservar la torre completa, sin que sufriera el desmochamiento ordenado por la reina Isabel la Católica. Este noble, primogénito de la familia Blázquez-De Ovando, apoyó al infante D. Alonso como aspirante al trono de Castilla, le fue reconocido el Título de Capitán de los Caballeros y Gente de guerra de todas las villas de las Órdenes Militares de Santiago y Alcántara de Extremadura por los Reyes Católicos y murió en 1489 siendo vasallo de su Real Consejo.

A continuación se encuentra el Palacio de las Veletas, que fue edificado en el siglo XVI. Conserva en su interior un espléndido aljibe de los siglos XI-XII. Este aljibe, que está reconocido como el primero mejor conservado de toda España, aún hoy, sigue recogiendo el agua de lluvia que le llega a través de un bello patio renacentista. El Palacio de las Veletas alberga, actualmente, el Museo de Cáceres, que está unido mediante un jardín a la Casa de los Caballos, donde se encuentra la Sección de Arte Contemporáneo.

Al otro lado de la Plaza de San Mateo se encuentran: la Casa del Sol o Solís
, que es una casa-fortaleza del siglo XV. El dueño de esta casa, Gómez de Solís, fue Mayordomo de la Real Casa de Trastámara, Maestre de la Orden de Alcántara; murió en 1473 en un período de continuas luchas que devastaron Extremadura. La Torre y Casa de los Sande, góticas del siglo XIV, reformadas en el siglo XV, de las que sobresale la torre, con enorme matacán en esquina sujeto por nueve grandes ménsulas, fue desmochada, aunque sólo debió quitarse el almenaje, pues aún hoy conserva la bóveda de crucería que cerraba la cámara superior. Y el Palacio de los Golfines de Arriba, del que era señor García Golfín, que fue Regidor del Ayuntamiento de Cáceres por merced especial que le hicieron los Reyes Católicos, Continuo de la casa de Isabel La Católica y Camarero del príncipe D. Juan.

Pero no sólo existía este tipo de familias nobles en la ciudad; diversas minorías dejaron también su propia huella, ejemplo de ello es el Barrio Judío conocido como "Judería Vieja", es una zona de cuestas y empinadas calles donde se puede observar la forma de vida analizando sus viviendas, de reducidas dimensiones, adosadas a la muralla que aprovechaban como muro de la casa, todo el barrio gira en torno a la ermita de San Antonio, edificada en el siglo XV sobre la antigua sinagoga judía. También los mudéjares dejaron muestras de su paso por la ciudad, como prueba de ello podemos ver la "Casa Mudéjar
", del siglo XIV.

Ya en el siglo XVIII encontramos las últimas construcciones, entre las que cabe señalar la remodelación del Arco de la Estrella
por Manuel de Larra Churriguera. Está considerado como la puerta más importante de la Ciudad Monumental, ya que fue el lugar elegido por la Reina Católica para jurar los Fueros y privilegios en 1477 y dos años más tarde, en 1479, el Rey Fernando juró los fueros en este mismo sitio.

En la ciudad extramuros podemos observar una serie de palacios e iglesias de diferentes épocas, entre otros podemos destacar la Iglesia de Santiago
, con retablo de Berruguete; el Palacio de Godoy, renacentista, ordenado construir por Francisco de Godoy a su regreso de América. La Iglesia de San Juan, el Palacio de los Duques de Abrantes, el Palacio de la Isla, el Convento de Santa Clara y el Complejo Cultural San Francisco, que se levanta sobre un antiguo monasterio franciscano. Dominando la ciudad encontramos el Santuario de Nuestra Señora de la Montaña, declarada patrona de la Villa en 1668.


Opinión sobre la página a la que acudí:
Esta página está muy bien, aunque carece de fotos lo que resta el valor de la página; a las personas que son foráneas no se les muestra imágenes de la evolución que ha sufrido la ciudad, es por esto por lo que este bloque de la página del Ayuntamiento podría mejorarse. El texto que viene a continuación está copiado directamente de la web mencionada. Esta entrada dará paso al siguiente bloque temático: Arte en Cáceres.

Saludos compañeros

Esta es una publicación de prueba para comprobar el funcionamiento del weblog para la asignatura de Nuevas Tecnologías Aplicadas a la Educación. Espero que las entradas o publicaciones sean de su agrado. Un saludo a todos.

Andrés Tovar Franco